Lucha Underground, ¿Una alternativa a la WWE?
Por Francis Rivilla
No es una novedad por estos lares (entendiendo lares por Can it be all so simple) si expreso mi desencanto con el material que nos llega desde hace demasiado tiempo en la WWE (Antes World Wrestling Federation). Lejos queda la época dorada de los noventa, con carismáticos personajes como Hulk Hogan, The Ultimate Warrior, Bret Hart, Macho Man, Ted Dibiase Mr. Perfect, Jake “The Snake Roberts” y un largo casi interminable etcetera de wrestlers que iban desde la técnica más depurada al gimmick o al carisma puro. Algunos de estos disimulaban la falta de habilidades dentro del ring con promos geniales y un gimmick(personaje al que interpretan) llevado a la perfección, eran comienzos de los años noventa y todo era de otro modo. Ni hablar tiene el final de la Attitude Era, donde los storylines te hacían volver por más wrestling, dejó a esta promoción sumida en una crisis de identidad, crisis que aún a día de hoy tiene repercusiones en el producto que se ha convertido este deporte-entretenimiento: un espectaculo que desprende cierto infantilismo lejos de una imagen dura del wrestling incluso llegando a habitar este limbo en el que nos sumimos ahora mismo.
A día de hoy podemos disfrutar (elección de palabra no muy acertada) de unos programas semanales en los que el wrestling ha pasado a un segundo plano. Nada de combates memorables, nada de desarrollar una historia para ensalzar a unos personajes que por otro lado necesitan una dosis doble de carisma por vía intravenosa, el despido de Alberto del Río o la marcha de CM Punk no ayudan a que la compañía de Wrestling de Vince McMahon vuelva a subir arriba.
Pero por otro lado, ¿Qué alternativas tiene el fan del wrestling? En mi opinión, habría que desechar de esa lista a TNA. La calidad de su producto no es comparable a la de la WWE en sus peores momentos. Desde esta promoción intentan lograr sin éxito equiparar un producto a otro tal como hizo la WCW en su momento. Sus combates cuentan con cientos de movimientos, donde no existe la “historia” dentro ni fuera del ring y donde se anula la personalidad de cada luchador (no sabemos si esto es voluntario o involuntario). La única comparación obvia con WWE es que en sus filas puedes reconocer a antiguos talentos de la promoción desarrollada por los McMahon. En TNA son incapaces de lograr esa creación de súper estrella que tan bien se le daba a la WWE, canciones de entrada excesivamente parecidas, personalidades sin desarrollar y combates con abuso de spots (llaves y acciones) que restan credibilidad y dramatismo en cada lucha.
Una opción que se me ocurre bastante interesante es la que ofrece el canal de cable estadounidense El Rey Network. Este canal ofrece programación en inglés orientada al público latino de USA. El impulsor de este canal no es otro que Robert Rodríguez, director, guionista, productor, enamorado del grindhouse y conocido por títulos como El Mariachi, Abierto hasta el Amanecer o Machete. El Rey no sólo está produciendo series de televisión (Matador o la versión televisiva de Abierto hasta el Amanecer) sino que tiene un espacio en su programación propia para el wrestling. Robert Rodríguez es uno de los directores más refrescantes y subversivos del panorama, con lo que desde Can it be all so simple no podíamos perdernos su programa de lucha libre.
El Rey Network y Asistencia, Asesoría y Administración (AAA), una de las promociones más potentes de lucha mexicana, han creado su propia federación de wrestling: Lucha Underground. Detrás de este nombre algo cutre podemos encontrar un show semanal de cuarenta y cinco minutos con una producción cuidadisima, viejos conocidos de la WWE con toda la vida de wrestling a sus espaldas como Chavo Guerrero, Johnny Mundo (conocido como John Morrison en su andadura por la WWE) o el actual campeón de los pesos pesados de la AAA Alberto el Patrón (Alberto del Río, ese que tanto deben echar de menos en la compañía de los McMahon), talentos de la AAA como Fenix, Super Fly o El Texano Jr., un promotor heel (no es buen tío) “español” y todo el drama que puedes esperar en una telenovela mexicana.
El resultado acaba siendo bastante atractivo si bien aún tiene detalles por limar: los ángulos de cámara a veces no ayudan a vender bien los combates, el ritmo de los mismos puede llegar a ser desquiciante (a veces) y algunos gimmicks parecen de risa, algo que solemos ver más en la lucha mexicana. Seguiremos de cerca el desarrollo de este programa como una buena alternativa al panorama (no muy halagüeño) del wrestling que la WWE nos viene ofreciendo últimamente, Lucha Undergound tiene futuro y hace lo más importante: no intenta competir con la World Wrestling Entertainment de igual a igual, sino ofreciendo un producto novedoso y diferente en algo tan clásico como la lucha libre. Stay tuned!
Desde luego no eres el único que se queja de la calidad de la WWE en demasiados meses, además de la marcha de algunas estrellas queridísimas por el público el push a otros como Roman Reigns que si bien son buenos aun no creo yo que sea el momento de darle ese push desmesurado.
Saludos
Lo de Roman Reigns es de traca: un tio con carisma cero, superverde en el ring y en el micro y a punto de convertirse en WWE World Heavyweight Champion. Creo que hay wrestlers más cualificados aunque con una planta distinta a la que V.K. McMahon gusta en sus campeones.