The night of: cinco razones para verla ya

Por JD Romero, @JD_Romero23

Nadie duda a estas alturas y desde hace bastante tiempo de que estamos en el tiempo de las series. Buscamos en ellas algo que falla en las producciones cinematográficas; una cadencia y riqueza de detalles cuyo formato nos puede ofrecer y nos damos cuenta de que son una realidad y una gran moda cuando nuestros conocidos que jamás han tenido ninguna inquietud al respecto comienzan a hablarnos del tema. Y es que las cosas buenas no sólo se hacen para nosotros, también para el resto.

La cosa es que hay series reconocidas y de las que todo el mundo habla y muchas otras que son tapadas y pasan desapercibidas por gran parte del público, debido a la inmensa cantidad de producciones que se realizan y que esperemos no acaben de matar de éxito este formato que nos está haciendo la vida un poco más llevadera. No en vano la HBO ha producido series como Westworld, Boardwalk empire, Silicon Valley, Girls, Treme, Bored to death, The leftovers, Deadwood, Juego de tronos, True detective, Six feet under, Los Soprano o The Wire, si a eso le sumamos el resto de series sobresalientes de las demás productoras es normal que a veces otras que podrían considerarse menores (aunque de magnífico nivel) queden solapadas, al menos a nivel de gran público.

Hoy desde Can it be all so simple nos gustaría hablar de una serie rica en matices, que evoluciona in crescendo y que te deja un regusto agridulce durante días y una extraña sensación en la cabeza, como de haberte dado de nuevo de bruces con la realidad. Y es que la vida puede ser tan maravillosa como jodida y a veces las dos cosas… y si no que se lo digan a Nasir Kahn. Sin más dilación estas son las cinco razones para ver The night of, aunque podríamos haber subrayado muchas más:

1- John Turturro

Con una trayectoria irregular que va desde lo mejor (los hermanos Coen, Spike Lee) hasta lo peor (esa pesadilla en forma de saga interminable llamada Transformers), nadie duda de que John Turturro no sólo es un actor solvente, creíble y con una gama de registros bastante amplia, sino que además es un tipo capaz de llenar la pantalla. En The night of se convierte en la gran baza para ver una serie llena de aciertos -aunque también con errores- en la que interpreta a un abogado de oficio al que nadie se toma en serio, con una vida personal desastrosa, un hijo que apenas le habla y con eccemas en los pies debido al estrés y las alergias. Un personaje construido en base a inseguridades y defectos al que le toca el mayor caso de su vida y que sin embargo es capaz de moverse bien en las calles de Nueva York. Y es que al fin y al cabo esa es la riqueza del personaje y el acierto de la elección del actor nacido en Brooklyn aunque de origen italiano; los matices y capas de su personalidad: acrisolado y dubitativo pero también duro, débil ante el público pero seguro de sí mismo en la calle. Turturro vuelve a demostrar que a pesar de que -muy- de vez en cuando acepta papeles ridículos por dinero, sigue siendo uno de los mejores actores de su generación. No deja de ser curioso que el mayor acierto de esta producción fuese la tercera opción tras el fallecido James Gandolfini y Robert De Niro.

 

2- Un golpe de realidad

¿Qué ocurre en el país de la esperanza si eres pobre, pero inocente, y se comete un crimen que todo apunta a tí? pues que te pudres en la cárcel. The night of nos vuelve a mostrar la realidad de un país (y un mundo) preocupado por las redes sociales y otras frivolidades mientras la justicia, la solidaridad y la igualdad se caen a trozos… si no se han caído ya del todo. Las personas de clase alta tienen buenos abogados que harán que el jurado piense lo que ellos quieren, porque al fin y al cabo no se trata de ser culpable o inocente, sino de convencer a esos seres de que se es y por lo tanto lo más importantes es la narración que se hace de los hechos, por muy alejada que esté de la realidad. Y si no se les puede convencer porque todas las pruebas parecen demasiado concluyentes al menos sembrarles la duda: podrían enviar a la cárcel de por vida a alguien de quien dudan si es un criminal y tampoco se puede vivir con esa carga de conciencia.

Pero esta serie no es únicamente sobre justicia, sino sobre lo jodida que puede ser la vida a veces. Trapicheos de drogas, acoso sexual, mujeres millonarias que se acuestan con monitores de gimnasio previo pago, problemas para pagar el alquiler y la salud, la maldita salud.

3- New York, New York

Decía Woody Allen en el maravilloso libro “Woody Allen por sí mismo” de Richard Schickel que había estado en todo el mundo, en ciudades fantásticas de todo el mundo pero que ninguna era como Nueva York, cosa que el arriba firmante suscribe completamente. La ciudad es preciosa y romántica en Tribeca, peligrosa en Queens, Ruidosa y artificial en Times Square, musical en el Bronx e incansable trabajadora en Brooklyn y todos esos niveles son exhibidos, mezclados y expuestos en The night of. Como suele suceder, Nueva york es otro de los grandes protagonistas de la serie, la producción no duda en recrearse en sus calles, pubs, restaurantes y edificios públicos como en los personajes que la pueblan para construir una historia solvente y sórdida de una riqueza infinita. The night of está basada en la serie británica Criminal Justice y sin embargo, encontramos en la ciudad elegida para esta versión a su mayor aliada.

4- La dirección y la fotografía

Steve Zaillian tiene una corta pero respetable carrera a sus espaldas con títulos como En busca de Bobby Fischer (1993), Acción civil (1998) y Todos los hombres del rey (2006). Un curriculum notable pero espaciado en el tiempo en el que no dudamos en dos cosas; Zaillian no escoge el primero proyecto que se le ofrece y sabe realmente donde colocar una cámara y como moverla. La explotación que se hace de los callejones de Nueva York, de desorden de las casas de los protagonistas o de los policías no puede ser mejor para sacar la belleza y la mugre de la vida cotidiana de una serie de personas normales que se ven envueltas -sin ni siquiera saber como- en un crimen notorio a nivel nacional.

5- Los actores secundarios

Porque no sólo por John Turturro y la ciudad de Nueva York vive esta serie. Riz Ahmed está genial en el rol protagonista y en su metamorfosis interior y exterior, Bill Camp magnífico como duro policía cuya vida personal está completamente vacía e igualmente el resto del reparto, desde los familiares de Nasir Kahn hasta los compañeros de la cárcel y el resto de secundarios. Un casting florido e interracial que es capaz de sostener una historia muy a menudo contemplativa y basada en diálogos que no son concluyentes, gestos y caras. Maravillosos.